viernes, 20 de mayo de 2011

EREs: el PSOE, los “Fondos Reptiles” y la corrupción clientelística




¿Qué es un ERE? ERE significa “Expediente de Regulación de Empleo”, un procedimiento contemplado en la legislación española mediante el cual una empresa en crisis busca obtener autorización para suspender o despedir trabajadores.

Tiene por objeto obtener de la autoridad laboral competente un permiso para suspender o extinguir las relaciones laborales en un marco en el cual se garantizan ciertos derechos de los trabajadores. Suele tener un tiempo prudencial hasta que el procedimiento llega a su fin, porque interviene un Juez Laboral y la empresa debe demostrar la necesidad de tal procedimiento.

La Junta de Andalucía, bajo la presidencia del incombustible Cháves, creó un ERE especial, que se otorgaba en casos excepcionales, cuando era crítico esperar todo el proceso judicial y administrativo de un ERE normal. La Junta otorgó para estos casos 641 millones de euros desde 2001. Hasta aquí todo bien, pero es que este “Fondo de reptiles para la crisis” (como el Consejero socialista mismo lo llamó ante el Juez) secreto no se utilizó para la tarea original, sino para financiar descaradamente al PSOE andaluz y a una trama de afiliados del PSOE y UGT y familiares.

La expresión "fondo de reptiles" procede de la época de la unificación de Alemania. El canciller alemán disponía de fondos robados a sus enemigos en las guerras, con los que financiaba propaganda a su favor y silenciar a sus críticos (a los que él llamaba reptiles). En cambio de ser un mecanismo rápido y eficaz de salvar empresas en quiebra inminente y trabajadores andaluces a punto de ser despedidos, el PSOE, desde la Conserjería de Empleo, lo transformó en una máquina corrupta para mantener su red clientelística y la financiación ilegal de los gastos de su partido.

El escándalo es histórico: la investigación interna de la Junta (empujada por una jueza de Sevilla) ha revelado que los beneficiarios irregulares de las subvenciones públicas a empresas en crisis no son cuatro o cinco, sino decenas y en casi todos los casos, personas del entorno familiar o político de los socialistas en el poder.

Resultado: el 54% de EREs financiados por la Junta de Andalucía contienen a falsos prejubilados, de tal forma que en la Andalucía Imparable, cobran prejubilaciones avaladas por esos EREs ahora investigados nada más ni nada menos que… ¡6.096 personas! Los intrusos en el caso de los ERE proceden de toda Andalucía, y siempre ligados directamente al PSOE o a UGT. Hay dos pueblos sevillanos que concentran algunos de sus principales actores. Uno es Camas; el otro es El Pedroso, en la Sierra Norte. De allí es Javier Guerrero, figura clave en todo este asunto, director general de Trabajo con tres consejeros, desde 1999 a 2008.

¿Cómo funcionaba este mecanismo perverso? La Consejería de Empleo firmó un convenio con el Instituto de Fomento de Andalucía (IFA) en 2001 por el que la primera realizaba una transferencia al segundo, y el instituto pagaba ayudas a los despedidos por expedientes de regulación de empleo de tal modo que se pudieran prejubilar.

Cientos de miles de euros han ido a parar a las arcas del PSOE o a “hombres de paja” entre lo que había miembros del Partido Popular.

Mientras tanto los trabajadores auténticos afectados por los ERE critican que la Junta y el PP traten las presuntas irregularidades como arma "electoral", cuando ellos llevan cuatro meses sin cobrar porque "la Junta ha paralizado los pagos a las aseguradoras y éstas a los trabajadores".

Unos han cumplido años de trabajo para obtener una prejubilación, otros presuntamente se han llenado sus bolsillos con el trabajo ajeno. Ante el "instrumento de enfrentamiento permanente" entre el Gobierno y la oposición en el que se han convertido las presuntas irregularidades de los expedientes de regulación de empleo (ERE) por el "momento electoral" en el que están inmersos, más de 3.000 trabajadores andaluces afectados por los ERE se han concentrado este miércoles frente a la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía para pedir el pago "inminente de sus pensiones". Estos empleados "no reciben desde hace ya cuatro meses" sus pensiones

También existía un recurso de subvenciones dentro de estos EREs, se trataban de subvenciones ocultas a empresas, que iban a parar a misteriosamente a ayuntamientos socialistas: diez consistorios de la provincia de Sevilla (el principal Los Palacios y Villafranca), dos de Cádiz y uno de Jaén. Una vergüenza nacional y europea.

Demasiado evidente, demasiado descarado, ahora empiezan a salirle agujeros al saco de la mayoría electoral y la máquina de propaganda que todo lo ha tapado. Más allá del descrédito, del escándalo, al fondo, está la verdad detrás del márketing chavista de una Andalucía Imparable. La pobre, la del mayor fracaso escolar, la del mayor número de desempleados.

Sobran razones para un cambio radical.